Ubicado al norte de Madrid, el centro de producción de Netflix en Tres Cantos se ha consolidado en esta última década como uno de los pilares estratégicos del entretenimiento europeo.

Desde su inauguración en 2019, este hub ha pasado de ser una apuesta ambiciosa a convertirse en una infraestructura clave para la creación, postproducción e innovación audiovisual a nivel continental. No es casualidad que sea la sede con mayor capacidad operativa de Netflix en toda la Unión Europea.
Con diez platós, más de 22.000 metros cuadrados de superficie y tecnología de vanguardia, el centro permite a las productoras trabajar en múltiples proyectos simultáneamente.
Desde salas de edición con Dolby Atmos y HDR, hasta espacios dedicados al trabajo colaborativo en la nube, Tres Cantos ha roto el modelo tradicional al integrar bajo un mismo techo producción y posproducción. Esta unión permite no solo una mayor eficiencia técnica, sino también una libertad creativa inédita para los equipos involucrados.
El impacto de este centro va más allá de los muros del complejo. Títulos como ‘La sociedad de la nieve’, ‘Berlín’ o ‘Respira’ han empleado tecnologías desarrolladas o testadas allí, como la producción virtual con pantallas LED, o la gestión automatizada del color.
Incluso proyectos como ‘1992’ han podido acceder a herramientas de edición remota en tiempo real, lo que permite trabajar desde distintos continentes sin perder calidad ni cohesión.