Telecinco cerró este lunes el último capítulo de ‘La favorita 1922’, la serie de época protagonizada por Verónica Sánchez y Luis Fernández, que ha ofrecido sus dos temporadas de forma consecutiva.

El episodio, titulado ‘La trampa’, bajó el telón con una mezcla de emociones intensas, revelaciones inesperadas y un final que deja abierta la posibilidad de un regreso.
La producción de Bambú arrancó con fuerza, logrando cifras muy esperanzadoras en su debut. Más de 1,5 millones de espectadores y un 17.1% de cuota la colocaron entre los mejores estrenos del año para una serie en abierto.
Pero a pesar de ese inicio prometedor, el interés fue descendiendo poco a poco, quedándose su desenlace en un 6.9% y algo más de medio millón de seguidores. Aun así, sus tramas lograron mantener a un núcleo fiel pendiente del cierre de todos los frentes abiertos.
Uno de los momentos más llamativos fue la llegada de Martina, la nueva ayudante de cocina que levantó sospechas desde su primer día. Su actitud descarada y el robo de la cubertería no hicieron más que confirmar las alertas de Lourdes.
Sin embargo, lo más impactante fue descubrir que Martina no era una desconocida: era la hermana de Roberto, y su llegada tenía implicaciones emocionales y familiares que descolocaron a Ana. A pesar del tropiezo inicial, la joven acabó recibiendo el respaldo de sus compañeras.
En paralelo, Rosa preparaba su despedida definitiva del restaurante, rumbo a Vigo con Miguel. Su adiós fue tan sentido como su reencuentro con Fermín, que sirvió de broche nostálgico a una historia que comenzó desde los primeros episodios.
Como contrapunto, Manuel y Cecilia aprovecharon la ocasión para anunciar su compromiso, sumando un momento de alegría colectiva al episodio.
Pero si algo mantuvo en vilo a los seguidores fue el plan de Elena y Julio para desenmascarar a Don César.
Todo se complicó cuando el marqués descubrió el engaño y contraatacó con una jugada mortal: envenenó a Elena durante una supuesta comida de reconciliación.